La diócesis Cuauhtémoc-Madera, ya tiene nuevo obispo; Reciben a Monseñor Jesús Omar Alemán

Cuauhtémoc, Chih.- Ante más de 3 mil personas, se llevó a cabo este sábado en el Poliforo Cuauhtémoc la misa de ordenación episcopal y toma de posesión del obispo de la diócesis Cuauhtémoc – Madera, Jesús Omar Alemán Chávez. El acto religioso fue dirigido por el representante del Papa en Mexico, Joseph Spiteri.

El acto inició con unas palabras de bienvenida del presbítero y hasta ahora administrador de la diócesis, Camilo Daniel Pérez, quien recibió a los miles de asistentes, entre los que se encuentran más de 100 sacerdotes y religiosas, obispos del país, autoridades civiles, representantes de comunidades indígenas y menonitas, así como el arzobispo Constancio Miranda.

La Santa Misa inició bajo la dirección del nuncio apostólico Joseph Spiteri, con los obispos en el altar y el obispo electo de Cuauhtémoc esperando el momento para su ordenación.

Después de la lectura de varios pasajes bíblicos, de los cuales algunos fueron hechos en idioma rarámuri, se procedió al rito religioso de ordenación del obispo de esta diócesis con cabecera en ciudad Cuauhtémoc.

Al inicio de este acto fue leído a todos los presentes el ordenamiento escrito por el Papa Fracisco, en el cual recordó la muerte del anterior obispo Monseñor Juan Guillermo López Soto y pidió a Jesús Omar Alemán Chávez que asuma esta responsabilidad y una vez que sea consagrado por cualquier obispo católico tome posesión del cargo.

Joseph Spiteli, asistido por el arzobispo Constancio Miranda y el Obispo de la Tarahumara, Juan Manuel González, fueron los encargados del acto de interrogatorio, en el cual el obispo declara su fe y su consagración a la diócesis y a la Iglesia Católica.

Posteriormente se dio el acto de imposición de manos por parte de todos los obispos presentes en el recinto, para luego dar paso a un discurso por parte del anuncio apostólico en México, en el cual hizo énfasis en llevar la fe y el evangelio para contrarrestar a quienes pretenden destruir a la iglesia y dividir al pueblo de Cristo.

Después de este protocolo religioso, los obispos y presbíteros felicitaron al nuevo obispo de Cuauhtémoc, quien inmediatamente después bajó del templete para abrazar a su madre.

Acto seguido el nuevo obispo se encargó de dirigir la eucaristía.